Comenzamos nuestro viaje con Leo al norte de Chile a finales de Enero. Nunca he ido más allá de la Serena, por lo que estaba muy emocionada de hacer este viaje.
Tomamos el auto y manejamos hasta Pichidangui, donde todo lo que hicimos fue tomarnos una foto y luego seguimos camino hasta llegar a Los Vilos, donde pasamos la primera noche.
Recorrimos un poco la calle principal, pero aparte de lugares para comer no había mucho. Salimos en nuestras bicis así que decidimos llegar un poco más allá y andar por la costanera. Ahí encontramos unos puestos armados en casitas al estilo salva vidas donde servían comida y olía bastante bien, por lo que ahí decidimos comer.
Despertando continuamos nuestro viaje hasta llegar a Coquimbo. (Pueden ver en el mapa)
No hay mucho entre Los Vilos y Coquimbo. Excepto una bencinera con llamas!! Qué les parece?
EN COQUIMBO
Estacionamos en una plaza cerca del puerto y salimos en bicicleta. Nos fuimos por la constanera y por la playa misma. No había andado en bicicleta sobre la arena, es bastante pesado. Así que siempre orillabamos la parte mojada donde la arena está más apretada. Anduvimos un buen tramo casi llegando a La Serena, donde se nos pinchó una rueda de la bici... Tuvimos que volver a donde estaba el auto y llevarlo nuevamente donde estaba la bici para poder cambiar la cámara.
Lo bueno fue que nos pasó frente a un lugar de camping. Bastante bueno el lugar, estaba frente frente a la playa y al lado de restaurantes. Muy bien ubicado, pero un poco caro, aunque contaba con electricidad (enchufes en cada sitio), luz, agua caliente y un kiosko con golosinas.
Luego salimos a recorrer un poco más el territorio. En una de nuestras vueltas nos aventuramos por un lugar un poco abandonado y nos tocó cruzar por un pantano maloliente. Fue lo más emocionante de la vuelta la verdad y nos gustó salir victoriosos